El Colegio de Abogados de Málaga celebró el pasado domingo su tradicional misa en honor a Santa Teresa de Jesús, patrona de la institución, en la Catedral de Málaga. La ceremonia, que reunió a una amplia representación institucional, judicial y colegial, volvió a consolidarse como una de las citas más solemnes y concurridas del calendario colegial.
La eucaristía fue presidida por la decana del Colegio de Abogados de Málaga, acompañada por los miembros de la Junta de Gobierno y los decanos eméritos José Mª Davó, Nielson Sánchez y Francisco Javier Lara. Ofició la ceremonia el Ilmo. Sr. Dean de la Catedral, don José Manuel Ferrary Ojeda, junto al Rvdo. don Juan Manuel Sierra López, hermano de uno de los letrados recientemente fallecidos.
En el protocolo colegial estuvieron presentes el defensor del colegiado, la presidenta del Tribunal Arbitral de Málaga (TAM), el presidente de la Junta Electoral y una representación del Grupo de la Abogacía Joven (GAJ). El Coro José Luis Rueda Peña del Colegio de Abogados acompañó la celebración, aportando solemnidad al acto.
El evento contó con una nutrida representación institucional, entre la que destacó la vicepresidenta de la Diputación Provincial, Margarita Caracuel; la delegada territorial de Justicia, María Pardo; la magistrada-jueza decana de Málaga, Ana Hurtado de Mendoza; el coordinador provincial de Letrados de la Administración de Justicia, Rafael Jiménez Villarejo; el subdelegado de Defensa, coronel Lorente; y el comisario principal jefe provincial del Cuerpo Nacional de Policía, José Rodríguez. También asistieron el presidente del Colegio de Graduados Sociales, representantes del Colegio de Procuradores y los hermanos mayores de las cofradías de El Rico y La Sentencia, entre otros miembros de la vida institucional y social malagueña.
Durante la ceremonia se rindió un homenaje a los 19 abogados y abogadas fallecidos entre octubre de 2024 y octubre de 2025, cuyos nombres fueron recordados en un emotivo momento de oración. La misa reunió a casi un centenar de letrados y numerosos familiares de los compañeros difuntos.
El acto concluyó con una copa de confraternización en el Restaurante Antonio Martín, donde los asistentes compartieron un espacio de encuentro y recuerdo, en un ambiente marcado por la cercanía y la unión del colectivo.